«En este bendito nuevo día, todo está previsto. Nada queda fuera de mi plan divino, porque Dios me acompañará hoy y por siempre.»
Las veinticuatro horas de cada día, la expresión oral o pensamientos de las cosas que deseamos que sucedan, o los temores de no lograrlas, representan DECRETOS que se convierten en condicionantes de nuestros actos.
Nuestro cerebro y espíritu nunca descansan y están siempre despiertos. El espíritu, con contacto con Dios orienta nuestra voluntad hacia la superación, elevación progresivas y el logro de nuestros mejores fines. El cerebro, que responde a esas motivaciones espirituales y volitivas, las transmite como órdenes que ponen en movimiento al resto del cuerpo.
Así, cuando decretamos que tenemos buena salud, que la vida es bella, que estamos contentos, que vivimos de la mano de Dios, ese mensaje recibirá de nosotros esa fuerza universal que rige nuestras vidas y en función de eso nos devolverá los resultados.
Si decretamos que todo lo que haremos estará en función de amar y disfrutar las personas, el paisaje y todas esas bendiciones que Dios puso sobre la tierra para nuestro disfrute, nadie podrá interferirlo, porque la fuerza del decreto la respalda ese poder superior y universal.
Decretar que rebosamos de amor, suficiente para nosotros y nuestro prójimo; que somos fuente de placer, de alegría, de generosidad nobleza, sensibilidad, caridad y solidaridad, asegurará que los resultados de nuestras realizaciones lo sean de la misma naturaleza.
Cuando decretamos que dando nuestra mano transmitiremos optimismo, alegría, salud, ese decreto transformará nuestro saludo afectuoso en influencia magnética positiva, que alcanzará y beneficiará a nuestros interlocutores, aunque pudiera ser que conscientemente ellos no lo perciban. Pero además incrementará nuestra fuerza positiva y felicidad.
Así como cuando decretamos cosas positivas y beneficiosas, el universo conspira para que se materialicen, de la misma forma, si nuestros dichos son negativos (decretos), esa misma fuerza universal hará lo necesario para que se cumplan conforme los decretamos.
Creo en el pensamiento positivo, la inteligencia emocional, la autosugestión, la telepatía, la visualización; así como que, en mayor o menor grado, la ley de la atracción influye en nuestras actuaciones, conforme nuestras presunciones y operaciones mentales.
Por dilatadas, edificantes experiencias y resultados, la vida me ha demostrado que no es suficiente con el decreto, la visualización, la buena intención y el magnetismo, sino que todos estos elementos primordiales deben ir acompañados de la proactividad y diligencia personal.
Millones de proyectos, buenas ideas e intenciones, se quedaron en el nebuloso mundo de las ideas, porque carecieron del dinamismo que le imprimen esos elementos fácticos representados por la diligencia, la proactividad y la mejor dedicación a su materialización.
Por eso, en adelante, cuando le asalten pensamientos negativos, se atemorice pensando que no puede lograr algo, decrete lo contrario; convénzase de que es posible; de que Dios no se muda, sino que sigue a su lado confiando en su inteligencia, confianza, fe y diligencia en las cosas que hace… no lo defraude.
Próxima Entrega: PROGRAMA DIARIO DE VIDA
Totalmente de acuerdo con lo escrito sobre LOS DECRETOS. La mayoría de los sucesos de nuestra vida son reflejo de nuestra forma de pensar pero, no basta con el Proyecto (que en sí representa un avance), falta la ejecución de dicho proyecto, el cual en este proceso pensar-actuar representa el broche de oro.
Esta muy lindo el escrito, felicitaciones.
Excelente articulo Los Decretos.
Dr Amauri.
Los problemas no se resuelven con consejos sino con terapias para buscar lo que está originando el conflicto y posteriormente junto con el paciente conseguir la solución. Esto por un lado, por otro lado, es cierto que tenemos creencias religiosas que pudieran ayudar momentaneamente a resolver ciertas situaciones pero, la fé es confianza en uno mismo, es otra cosa y quién no tiene fé en sí mismo no tiene fé en nada, la cual también habría que buscar en el paciente las razones para no tener fé y su origen, e ir resolviendo poco a poco sus paradojas!
No dudo que los consejos medio ayuden, pero también es necesario acompañar al paciente para que juntos busquen una solución a sus propios conflictos.
Abrazos.
CUANDO LEO UN ARTIC ULO COMO ESTE SIENTO QUE LA VIDA ME DESENMASCARA Y ME MUESTRA LOS ERRORES COMETIDOS EN EL PASADO, YQUE DIOS ME DA OTRA OPORTUNIDAD PARA SALIR ADELANTE Y EMBESTIR LAS VICISITUDES DE LA VIDA CON POSITIVIDAD DECRETANDO QUE TODO LO QUE NOS PROPONEMOS LOGRAR LO LOGRAREMOS YA QUE DIOS SIEMPRE NOS ACOMPAÑA Y ELQUIERE VERNOS FELICES Y QUE LOGREMOS TODO AQUELLO QUE NOS PROPONEMOS.-