Feeds:
Entradas
Comentarios

Archive for the ‘TROPIEZOS Y EQUIVOCACIONES’ Category

FE Y PROACTIVIDAD

Los términos FE y PROACTIVIDAD siempre han caminado juntos al lado de toda persona exitosa, independiente de cual fuere el caso o circunstancia personal de que se trate. Hoy la  Psicología Positiva ha probado que hasta en los procesos de sanación de una enfermedad, la fe y la proactividad  ya  son  no solamente convenientes sino indispensables.  Aquellos apotegmas bíblicos de que “… la fe mueve montañas…”  y “…dame tus palabras y yo te daré mis obras…” son una realidad a favor de cualquier aspiración humana. Cuando digo que caminan juntos es porque únicamente la fe  no es suficiente si no se acompaña de la actividad constante y  entusiasta,  que  permite lograr la meta que nos proponemos. Es por eso que cuando hablamos de alguien que es proactivo, incluimos en dicho vocablo la fe, la disciplina, la constancia, el entusiasmo, la creatividad,  y muy especialmente, la confianza en sí mismo, que adicionamos al duro trabajo para encontrar y administrar debidamente los elementos y/o factores que fueren más convenientes o necesarios, en cada caso.

Considerando -como es cierto-  nuestra vida es elemental, porque fuimos diseñados de tal manera que tenemos  una especial capacidad para adaptarnos a cualquier ambiente o situación que se nos presente, no es fácil entender como algunas personas no terminan de asimilar que es en y dentro de sí mismos, donde se encuentran los elementos necesarios para lograr una vida integralmente dispuesta a la felicidad, cuales como antes hemos comentado, es la fe en nosotros  mismos como principales actores de nuestra propia vida, el elemento decisivo para lograr el éxito propuesto. De nada sirve la formación académica o cultural de cualquier género, si  no nos  convencemos de  nuestra capacidad para superar los escollos que se  presenten y por encima de ellos adelantar y lograr nuestras propuestas.

En tal sentido, igualmente de nada sirve un título o certificado de conocimiento particular, si no lo  utilizamos como canal para regir una conducta proactiva.  Es  que el Universo, del cual formamos parte, es sinérgico,  y como consecuencia, somos… energía; por lo cual, en tanto y en cuanto actuemos con el convencimiento de esa energía que nos hace proactivos, sin duda alguna seremos exitosos. De igual manera, si no ponemos en movimiento esa misma energía, alimentada por la fe, la confianza y el optimismo que nos alimenta para enfrentar cualquier evento o circunstancia, jamás alcanzaremos con suficiencia el logro de nuestras ambiciones. No se trata de un asunto de tiempo sino de persistencia, disciplina, confianza  y  diligencia. Debemos estar permanente y  absolutamente convencidos, que no  fuimos hechos para el fracaso, la mediocridad o la infelicidad,  sino que, por el contrario, como alguien lo escribiera, “Vinimos a este mundo, condenados a ser felices.”; que es como decir:  especialmente dispuestos a lograr el triunfo y la felicidad en una vida buena, que nos merecemos.

Asimismo, en lo social que conlleva el amor, la amistad, la familia y el éxito económico,   son más importantes que el género o la belleza física, la genialidad con que utilicemos nuestras características personales originarias, la cultura adquirida y la aplicación adecuada de las buenas experiencias propias y ajenas que nos dan los años vividos,  en el progresivo desarrollo de nuestras relaciones cotidianas. Somos parte de la gran familia humana, por lo cual, no basta con ser un buen médico, abogado, empresario  o artista para lograr el éxito integral,  si no introspeccionamos la necesidad de nuestros congéneres de ser tratados con respeto, consideración, sensibilidad y solidaridad con sus propias causas e identidad individual, lo cual requiere de empatía para ponernos siempre en el lugar de los demás y de tal forma idear cual sería nuestra propia reacción emocional si estuviésemos en  su caso.  Es considerando  y aplicando apropiadamente todos estos factores como podemos llamarnos con propiedad, agentes de progreso de una sociedad, todos los días más  orientada a la tecnología,  y por tanto necesitada de promotores de  fe y  proactividad, en función del bienestar supremo de todos los integrantes de esa misma sociedad a la cual pertenecemos.

Si tienes alguna duda o requieres aclaración sobre el tema aquí tratado, el correo del autor está disponible: amauricastillo@gmail.com

Read Full Post »

VENCIENDO LOS TEMORES

VENCIENDO LOS TEMORES

 

Algunas veces he escrito que “…los temores distorsionan la realidad…”,  y hoy más que nunca estoy absolutamente convencido de esa realidad, pero también que es posible combatirlos y derrotarlos. Cuando miro hacia atrás en  mi vida,  acepto que aquellos que alguna vez me afectaron, nunca llegaron a actualizarse o por lo menos en la entidad de gravedad o consecuencias negativas, como inicialmente los imaginé. Asimismo, por verdadero y didáctico, debo admitir y divulgar que cuando en alguna medida se materializaron, sus consecuencias no fueron tan negativas o graves para mi formación físico-espiritual; sino que  por el contrario, o representaron una enseñanza en pro de una mejor vida o agradecí a Dios porque hubiesen sucedido.

No pareciera discutible, que el temor -cuando fuere razonado y controlable- represente un mecanismo de defensa o de previsión natural; pero también estimo que en su más alto porcentaje, este indeseable sentimiento es sólo creación de nuestra mente que, sin que se haya actualizado porque se trate de presentimientos, nos afecta en el largo camino existencial, perturbando y disminuyendo nuestra capacidad de disfrutar de los sentimientos de seguridad y plenitud de vivir todas las hermosas y reconfortantes bendiciones que tenemos a nuestro alcance, producto de nuestra condición de seres inteligentes, dotados de raciocinio y sentidos que nos alertan frente a situaciones dañosas probables, actuales o futuras.

Si nos convencemos de nuestra capacidad para ser positivos, optimistas, proactivos,  valientes, luchadores, vencedores de obstáculos, generosos, útiles y diligentes; adicionadas estas cualidades a nuestra herencia divina, que nos da cualidad especial dentro de todos los seres vivientes, para reaccionar o aprovecharnos de cualquier situación o circunstancia desventajosa, podemos superar cualquier escenario atemorizante,  que sin ser una realidad -como son la mayoría de los temores- atente con robarnos o disminuir esa bendición especial de que disponemos de vivir una vida plena, disfrutando con fruición de tantas cosas buenas, hermosas y edificantes; situaciones, sentimientos y circunstancias reconfortantes que nos producen alegría, solaz, plenitud y consecuencialmente,  alegría y felicidad.

Nosotros mismos decidimos la manera en que queremos vivir. Si  lo queremos experimentar intensamente, de manera milagrosa y bella, estamos obligados a imbuirnos y practicar diariamente todas esas virtudes ya mencionadas, que son un escudo infranqueable frente a ese enemigo permanente que es EL TEMOR: que al final, como ya lo hemos comentado, resulta de pensamientos negativos de lo que “Podría suceder” o “No hubiese ocurrido a tiempo”, cuales son especulaciones  mentales que estamos en capacidad de controlar con la confianza en sí mismos, la fe y la esperanza, que sí son reales como parte activa de nuestra propio dinamismo físico e intelectual; o si por el contrario, permitimos que una ficción mental que nos atemoriza, pero seguramente nunca llegará o si llegare no será tan grave, entonces por nuestra propia ineficiencia y no la de ninguna otra circunstancia, arruinará nuestro más preciado legado: UNA VIDA FELIZ. 

Read Full Post »

APORTE A LA PAREJA

PAREJA...Esto fue parte del texto de una consulta recibida de una dama quien es lectora de este Blog, solicitando asesoría de pareja:

“Me divorcié porque mi marido tenía muchos defectos y yo pensaba que no disponía de suficiente libertad, como cuando era soltera; sentía que mi vida era aburrida y llena de obligaciones. Creí que afuera me esperaba un mundo lleno de oportunidades, compañía y emociones; pero no fue así y un año después, ansío volver a compartir mi vida con alguien, aunque tenga defectos. Detesto esta libertad que sólo me sirve para sentirme sola y aburrida, entre tanta gente. Creo que esas obligaciones que tenía en mi relación perdida, me hacían sentir más útil y quizá… feliz.»

No me extrañó su confesión, ya que, algunas veces los integrantes de pareja magnifican sus dificultades, desestimando las muchas situaciones gratas que genera la relación. La libertad es un valor y como tal intangible, y de poco sirve si no se aprecia como importante aporte a la relación de pareja. La libertad para hacer cosas incorrectas, inapropiadas o inconvenientes, se convierte en una aberración: convertir un valor en antivalor. Por lo tanto, no es pérdida de libertad sentirse atado por amor a otra persona y cumplir nuestros deberes, cuando la otra parte acepta voluntaria y cariñosamente la misma situación y cumple con las suyas.

Materializar nuestro amor por esa persona que escogimos para hacer vida en común, suele ser encantador. El cumplimiento con entusiasmo de lo que nos corresponde, es lo que fortifica, hace plena, edificante y feliz la pareja. El mantenimiento del amor recíproco, la ternura y dedicación a quien se ama, no dan tiempo para el aburrimiento; escasamente se tiene tiempo para disfrutar de la variada gama de experiencias agradables que conlleva el amor conyugal. No hay mayor sentimiento de seguridad física y espiritual que la de sentir que se cuenta con alguien con quien enfrentar los momentos duros de la vida, compartir las alegrías y celebrar los éxitos mutuos; y eso se llama, amor de pareja.

El problema de mi consultante no radicaba en los defectos de su cónyuge, falta de libertad, variadas obligaciones o aburrimiento, porque esos elementos se presentan casi en toda relación humana; simplemente ella había perdido el amor por su pareja y al desaparecer el idilio, la ternura, la pasión, emigró la magia que se crea cuando la relación es edificante; entonces, la fantasía, la vanidad, el egoísmo toman su lugar y el amor… se va. Como lo escribiera el poeta colombiano Ismael Enrique Arciniegas: “Hace tiempo se fue la primavera… llegó el invierno fúnebre y sombrío. Ave fue nuestro amor… Ave viajera…¡Y las aves se van cuando hace frío!…”

Concluyendo, debemos considerar que, para ser feliz en pareja hay que amar a nuestro cónyuge de verdad, sin prejuicios, con dedicación, comprensión, solidaridad y lealtad plenas; porque para recibir, debemos dar y cuando ambos están conscientes de que la pareja no es asunto de uno sino de dos en todo y actúan en consecuencia, se refunden físico-espiritualmente, generando la permanencia necesaria para hacer y mantener una familia feliz, cual es el objetivo más elevado cuando hacemos pareja.

 

Read Full Post »

PERDON, AMOR Y NOBLEZA

NELSON MANDELA IINarrar la biografía de uno de los hombres más ilustres, nobles y bondadosos que ha parido la contemporaneidad, sería realmente, por conocido,  una repetición innecesaria: NELSON MANDELA. Sin embargo y no obstante que su vida es muy conocida como político, estadista y ganador del Premio Nobel de la Paz, su obra llena de valor, estoicismo, optimismo, esperanza, perdón, nobleza y lucha sin descanso, han sido un baluarte actual de la humanidad, que prevalecerá por siempre y sobre el cual las nuevas generaciones encontrarán una referencia de que, el perdón y el amor son los dos ingredientes más importantes para la reconciliación de los pueblos.

Nelson Mandela junto con su gente sufrió la más brutal represión durante muchos años, y personalmente  más de 27 años de duro encierro en la cárcel, en un país y una época donde la Justicia y el cuidado del Estado hacia sus nacionales, lo era únicamente para los blancos. En ese oprobioso sistema denominado el apartheid, impuesto por el Imperio Británico, él  nunca dejó de luchar ni perdió la esperanza en que siempre hay una luz al final del túnel, por lo cual sólo se requiere coraje, tesón, constancia y más constancia para alcanzarla.

Sin considerar las matanzas de sus conciudadanos y los castigos recibidos personalmente, cuando llegaron las condiciones, él inspirado en el amor, la paz y el perdón como única posibilidad de unir  a su pueblo, materializó esas virtudes uniendo el País al llamar a sus opositores y verdugos a hacer Gobierno conjunto, como máxima demostración de que sí era posible la reconciliación, si se unían las voluntades de  hacer patria.

Cual Ghandi, Mandela no utilizó armas sino que depuso la rebeldía de sus primeros años, para utilizar en contra de los enemigos personales y de su pueblo, el instrumento más poderoso que ha conocido la historia contra los Regímenes despóticos, inhumanos y autoritarios: LA PAZ.

Hoy, a los 95 años, Nelson Mandela ha cosechado el fruto de su duro trabajo durante toda su vida con la libertad de su pueblo, en su cama de enfermo con la atención, honores  y preocupación por su salud, de las más altas Instituciones y Personalidades del mundo, quienes le hacen llegar su reconocimiento y agradecimiento, independiente de su ideología;  porque el amor, el perdón y la paz, son el mayor patrimonio de que disponemos los seres humanos  para prevalecer como sociedades organizadas, con sentido de permanencia.

Read Full Post »

UN SUEÑO HECHO REALIDAD

Steven Paul Jobs, un chico como cualquier otro de San Francisco nacido en 1955, en principio para ser uno más del grupo de niños que, ni siquiera tuvo la suerte de ser criado por sus propios padres, pero él tenía una profunda diferencia con la mayoría: SOÑABA Y  CREIA EN SUS SUEÑOS.

No hablaré de su vida durante 56 años o su obra porque es demasiado conocida y en este momento todos los medios de comunicación social y divulgación global cuentan, con lujo de detalles, todos los pormenores de su excepcional historia desde su nacimiento hasta su muerte.

Trataré sobre lo importante  en que se constituye su vida para las nuevas generaciones, como prueba física y viviente de que, si somos diligentes, luchadores, positivos y consecuentes, los sueños pueden convertirse en realidad.

Este hombre, con alma de guerrero y espíritu de abeja, consciente de que los límites a sus ambiciones sólo él y nadie más podía imponerlos, se inició en las peores condiciones  en lo que él creía más importante para sí y para el mundo; hizo parte de su vida y logró con gran esfuerzo materializar uno tras otro todos sus sueños.

Sabemos que acumuló cientos de millones de dólares, pero eso no fue lo más importante. Lo relevante, lo trascendente fue el mensaje que dejó a la humanidad, demostrando que siempre es posible lograr las metas, si junto a los deseos ponemos los elementos de esfuerzo, intelectualidad, paciencia, optimismo y confianza, en que seremos capaces de lograrlo.

Steve demostró que en ese camino de la forma de  vida que escogemos, no tiene importancia tropezar y caer, si somos capaces de levantarnos, seguir adelante e insistir en nuestro cometido;  porque al superar la esquina, no importa cuando, él éxito espera.

Quienes le conocieron íntimamente, comentan que era hombre exigente pero alegre y edificador de su equipo humano, lo cual nos dice que vivió intensamente el camino de su vida, disfrutándolo a cada paso sin esperar a la meta, como condición  sine qua non para regocijarse.

Mi reconocimiento al hombre que supo ser, pero también a su extraordinario y vívido mensaje. El supo interpretar las palabras de Rudyard Kipling cuando aconsejaba: “Si puedes llenar los preciosos minutos, con sesenta segundos de combate bravío, tuya es la tierra y todos sus codiciados frutos y lo que más importa… serás hombre, hijo mío.”

Gloria a su recuerdo  y paz a sus restos.

Read Full Post »

¿Dónde estará mi oportunidad? Esta es pregunta muy común pero incompleta, porque no inquiere de qué oportunidad se trata.

Nuestra vida, en sí misma es una oportunidad para hacer, rehacer y deshacer todo cuanto creamos que nos conviene o no. Al fin y al cabo, como seres humanos originados en el Gran Hacedor, tomamos un poquito de Él y, de alguna manera extraordinaria, tenemos la posibilidad de hacer cosas que enriquezcan nuestra existencia.

No creo eso de que “La oportunidad la pintan calva”, o que, “Si pierdes la oportunidad nunca regresa”, porque son apotegmas negativos y nuestra vida tiene que ser siempre positiva, como única posibilidad de lograr nuestro mayor fin: SER FELICES.

Si amamos la vida y somos diligentes, cada día será fuente para crecer y hacer de cada momento una oportunidad a nuestro favor; tan cierto que, aún los tropiezos y los problemas, suelen representar oportunidad para aprender cómo hacer las cosas mejor, o evitar aquellas que nos perjudican o  dañan a nuestros semejantes.

Cada nuevo día es una bendición, especialmente porque siempre será diferente a los restantes, y de tal suerte, nos obsequia una gama de situaciones y circunstancia vivenciales irrepetibles, lo que nos indica que debemos disfrutar cada una de ellas con fruición, porque… jamás se repetirán y, por tanto,  si desaprovechamos esa oportunidad, nunca podremos recuperarla.

Que la oportunidad sea buena o mala, mejor o peor no es nada aleatorio; es algo que nosotros decidimos conforme a nuestra forma de ver la vida e interpretar los momentos, los eventos, las circunstancias y situaciones que diariamente enfrentamos.

Como seres racionales, somos el milagro más grande de la naturaleza: podemos convertir cualquier evento en una oportunidad que nos favorezca; somos fabricantes de sueños, que sabemos convertir en realidad; la magia, la pasión y la emoción, nacen y se reproducen en nuestra mente, que sabe proyectarla al exterior para crear situaciones positivas.

La oportunidad vive con nosotros; siempre está ahí, esperando por nuestra voluntad para convertir cualquier evento, pensamiento, sueño o realidad, en deleite para nuestra existencia. Y lo más importante, nadie puede arrebatarnos ese poder, porque es nuestra herencia de Dios que nos diseñó para EL TRIUNFO Y LA FELICIDAD, nunca para el dolor, la tristeza o el fracaso.

¿A qué esperar? Aprovechemos cada instante para hacerlo una nueva oportunidad, y demos gracias por ser únicos con tal poder sobre la faz de la tierra.

 

Read Full Post »

La crítica destructiva, casi siempre a espaldas del afectado, no aporta nada positivo a quien la produce porque su esencia es la de dañar, independiente de cuales fueren las consecuencias o entidad para el afectado o el grupo social en general.

El autor de la crítica destructiva, actuando de forma soterrada, con cobardía y ninguna nobleza, crea con su especulación una cortina, supuestamente protectora a sus propias frustraciones y fracasos, detrás de la cual esconde su falta de iniciativa para aportar soluciones  y su déficit personal de valentía, para alcanzar sus personales realizaciones.

Criticar y destruir es más fácil que enaltecer y construir. En el primer caso, no se requiere ninguna grandeza o esfuerzo; pero para el segundo, la nobleza, el trabajo y la dedicación son simplemente indispensables, y desventuradamente, los valores parecieran ser hoy menos comunes que sus antivalores.

La crítica destructiva siempre actúa como un “boomerang” en contra de quien la hace, desde el mismo momento que la produce. De alguna manera, por la concepción espiritual unívoca del ser humano, se traduce en autocrítica; en principio, ensucia el alma, corroe las entrañas, disminuye la esencia divina inherente al ser humano, adicionando un nuevo temor: el éxito de los demás.

En segundo término, cualquier consecuencia pudiere perjudicar gravemente al objeto de la crítica -con lo cual nada gana quien critica- pero de ninguna manera le beneficiará fundamentalmente. Es que el efecto autodestructivo deriva de las leyes naturales que sustentan la regla de oro de Jesús: “Haz por los demás lo que quieras que ellos hagan por ti.” La lógica elemental nos señala que el que siembra vientos cosecha tempestades; o como decimos en Venezuela: “El que a cuchillo mata no puede morir a sombrerazos.”

En la observación a mis congéneres he comprobado que toda acción engendra una reacción, más o menos de la misma entidad. Hasta ahora, no he encontrado personas realmente felices que acostumbren la crítica destructiva y malsana.

Mi existencia está llena de experiencias edificantes, al lado de personas cuya actitud es la de disminuir los defectos de las personas y enaltecer sus pocas o muchas virtudes, cual es lo contario a la crítica destructiva. De ellos he aprendido a vivir mucho de la felicidad que hoy disfruto y que me hacen evitar y combatir a toda costa, cualquier comentario o crítica destructiva.

Read Full Post »

A %d blogueros les gusta esto: