Archive for the ‘IMPOTENCIA MENTAL’ Category
¿QUE NOS ESTÁ SUCEDIENDO?
Posted in ACTITUD PARA SER FELICES, ACTIVIDAD SEXUAL, ADOLESCENCIA, ALEGRIA, AMAR Y SER FELICES, AMARGURA, AMOR FILIAL, ANCIANOS, AUTOANÀLISIS, BIPOLARIDAD DE VALORES, CAMBIO DE ACTITUDES, CAMBIOS ACTUALES, COMPORTAMIENTO INDIVIDUAL, CONDUCTA ABERRADA, CRIMEN, CRISIS ESPIRITUAL, CUERPO, CULPABILIDAD, CURRUPCION, DELINCUENCIA, DELINCUENCIA JUVENIL, DEPENDENCIA DE ALCOHOL, DEPENDENCIA DE DROGAS, DERECHOS DE LOS HIJOS, DESCONCIERTO COLECTIVO, DUALIDAD CUERPO ESPIRITU, DUALIDAD HUMANA, HOMBRES BESTIAS, IGNORANTES, IMPOTENCIA MENTAL, INCERTIDUMBRE, INOCENCIA, IRA, LENGUAJE SOEZ, LIMITES DE ACTUACIÒN, MACHISMO ATÁVICO, MALICIA, MALOS MOMENTOS, MORAL, NIÑEZ, NIÑOS VULNERABLES, NIVEL DE AFECTACIÒN, OBLIGACIÒN DE PADRES, ORIENTAR, PADRES, PADRES INEPTOS, RABIA, REFLEXION NECESARIA, REPETO POR LA PERSONA HUMAN, RESPETO A LAS LEYES, RESPONSABILIDAD PATERNA, SALUD MENTAL, TRAGEDIA FAMILIAR, VALORES HUMANOS, VALORES TRADICIONALES, VULNERABILIDAD, VULNERABILIDAD HUMANA on 11/04/2013| 2 Comments »
He vivido diferentes etapas de mi país y en los últimos cincuenta años he visto invertirse algunos valores, otros desmejorarse y nacer nuevos; pero la familia se mantuvo respetuosa de algunas intimidades que, especialmente para los niños y adolescentes no sólo son malos ejemplos, sino aberrantes, porque ensucian la mente, golpean el alma y lo más hermoso del ser humano… el amor.
Me refiero a los actos protagonizados el pasado Sábado en un Yate, en la playa “Los Juanes” en Morrocoy, por un hombre y una mujer completamente desnudos simulando posiciones y movimientos sexuales, sin pudor de ninguna índole, frente a la multitud de turistas que disfrutaban de la playa, donde habían familias enteras, niños, jóvenes y adolescentes, señoras y señores de la tercera edad; lo cual, dados los nuevos equipos digitalizados fue divulgado a los cuatro vientos. Como debe ser, las autoridades se pusieron tras la pista de los dos desvergonzados, quienes deberán enfrentar la Justicia.
Ahora bien, mi pregunta ¿Qué nos está sucediendo?, se refiere al hecho de que las personas que presenciaron tales actos públicos, inmorales y desvergonzados no protestaron o de alguna manera manifestaron su desagrado, sino que por el contrario, todos parecían emocionados, como si no existiera conciencia de lo inmoral y las consecuencias para la mente de los niños que tales eventos pueden conllevar, y la falta de respeto al público en general, de tales actos delictuales.
Es que quienes tenemos descendencia, especialmente niñas, siempre hemos cuidado de inculcarles el pudor, la decencia, la discreción y el respeto por el sexo, porque es fundamental en la pareja, que es la base de la familia, y esta la piedra angular de la sociedad.
El sexo es lo más hermoso, tierno y solidario que materializará el amor de la pareja y que mediante la descendencia mantendrá ese amor de dos que se aman más allá de sus propias vidas. ¿Cómo entonces puede aceptarse tales espectáculos sin la protesta colectiva? ¿Qué pasó con nuestra formación y nuestros valores? ¿Qué pasó con nuestro papel de padres y ductores de nuestros hijos? ¿Será que se nos olvidó que como padres los trajimos a este mundo sin permiso y el compromiso es diseñarles una vida sana y buena? Pues yo me niego a aceptar esta locura y desde aquí elevo mi más airada protesta y confío que la administración de justicia hará su parte, para evitar que se repitan estas barbaridades.
¿POR QUÉ TEMER?
Posted in DESCONCIERTO COLECTIVO, DIOS ES VENCEDOR DE CRISIS, DIOS NOS GUIA, FICCION MENTAL, FUTURO INCIERTO, HACER LAS COSAS BIEN HOY, HOY, IMPOTENCIA MENTAL, SENSACIÓN DE DESAMPARO, SENTIMIENTO PATOLÒGICO, TEMOR, tagged EL TEMOR Y EL FUTURO SON FICCIONES DE LA MENTE, LA UNICA REALIDAD VALEDERA ES NUESTRO HOY, SI DIOS ESTA CONMIGO ¿A QUIEN TEMERÉ?, SI DIOS ESTA CONMIGO NADIE PODRÁ CONTRA MI on 06/06/2008| Leave a Comment »
¿Qué origina el temor que tanto daño hace a los seres humanos?
Pienso que se trata de una reacción frente a la impotencia del vasto desconocimiento de las circunstancias que pudieren afectar negativamente nuestra vida; especialmente aquellas que tienen que ver con el porvenir.
Los dos, temor y futuro, son una especie de jugarreta de nuestra mente al presentarnos proposiciones que retan nuestro potencial de raciocinio, para determinar si algo es positivo o negativo, conveniente o inconveniente, actual o remoto.
Porque… ¿Qué es el temor sino una sensación de desamparo frente a supuestos males que pudieran acontecernos, pero que desconocemos cómo, cuándo y dónde podrían actualizarse?
Y el futuro…¿No es acaso una ficción de nuestra mente sobre un tiempo que podría sobrevenir, pero que realmente nadie podría asegurarnos con certeza si lo veremos o viviremos?
Nadie puede certificar que nos acontecerán los males que tememos, o que llegará para nosotros el tiempo futuro. Simplemente, se trata de operaciones mentales, de proposiciones racionales de lo que pudiera o no materializarse, pero que ocupan nuestra mente, a veces obsesivamente, afectando nuestra vida cotidiana, desmejorando nuestra capacidad de disfrutar de las muchas y variadas bendiciones de que disponemos.
La combinación temor-futuro se convierte en un cóctel nocivo, que produce el sentimiento patológico conocido como miedo, cuando el afectado se angustia, no por el mal de ese preciso momento, sino por la posibilidad de su acaecimiento posterior -que es incierto e indeterminable- ya fuere inmediato, mediato o lejano.
Ese temor a lo que podría sucedernos si tales o cuales condiciones se dieran, ocupa un buen espacio de nuestro intelecto y capacidad creativa, que bien podríamos utilizar para procurarnos mayor felicidad, disfrutando de todas las cosas bellas que encierra nuestro maravilloso hoy.
En múltiples ocasiones y con respecto a temores que me ocuparon, sucedió que «El miedo al suceso fue mayor que el suceso mismo.» Esto me enseñó que no debo anticiparme a los acontecimientos, especialmente cuando afectan mi felicidad, porque corresponden al mundo de lo posible; esto es que pudiera ser que nunca lleguen a actualizarse.
No permito que me afecte negativamente nada que corresponda a la concepción de «Lo que podría ser o suceder mañana o después de mañana», porque aprendí la única fórmula efectiva para prevenirlo, si es que alguna vez llegare a producirse: hacer las cosas bien… hoy. Nada más que eso puedo hacer y trato de realizarlo con diligencia y eficiencia.
Para fortalecerme frente a temores e incertidumbre del futuro, que como humano muchas veces me acechan, echo mano de un recurso que nunca me falla. Acepto que soy uno con Dios, que poseo parte de su luz, su poder y su fuerza. Entonces me repito hasta convencerme: ¿No hizo Dios los cielos, la tierra y es todo poderoso? Entonces, «Si Dios está conmigo… ¿A quien temeré?
Esa poderosa admonición me ayuda a disfrutar mi hoy, sin temores ni preocupaciones por un futuro, que ni siquiera sé si llegará para mí.