En este Blog expresaré mi propio testimonio, producto de más de medio Siglo de atenta observación del comportamiento humano en varios países y culturas, enriquecido con los intercambios de ideas en mis actividades como Asesor Familiar, Conferencista, Articulista, Abogado y Escritor, en cuanto a la posibilidad real, cierta y verdadera de que todo ser humano fue dotado por Dios de los mecanismos suficientes para lograr una vida feliz. Con esa intención escribí el año 2005 el libro “UNA VIDA FELIZ” y en el 2007 “LA PAREJA FELIZ”, que han ayudado a entender motivos y razones que pueden contribuir a su logro. Soy cristiano libre pensador, respetuoso de la persona humana y del libre albedrío de todo individuo. Por tanto me interesan todas las personas, independiente de su nacionalidad, credo religioso, raza, sexo, preferencia sexual o posición social.
Habiéndome presentado brevemente, comienzo por decirles: HELLO WORLD… HELLO PEOPLE, donde quiera que se encuentren. Gracias por permitirme cumplir con mi compromiso de dar un poco de lo mucho que he recibido en esta vida, compartiendo con ustedes parte de mi vida como hombre de sesenta y seis años de edad, con el privilegio de conocer dos mundos bien distintos, dos siglos y… dos milenios; lo que me obliga a divulgar los mecanismos que me posibilitaron la felicidad que he vivido por tantos años, y que estoy seguro disfrutaré hasta el último de mi vida.
De tal modo, les llevaré en una travesía que se inició en mi niñez llena de privaciones e incomprensiones, hasta llegar al día de hoy sano, salvo y feliz, con mi juventud prolongada y entusiasmo suficiente para vivir todos los días… una nueva vida. Quizás, porque en un mundo donde nos forman para lograr “grandes cosas”, no advertimos las pequeñas que pudieran ser las que sumadas conformen nuestra felicidad, pero que como las aguas de los ríos y el tiempo que pasan ya no regresan; y no van a quedarse allí esperando que nos devolvamos a recuperarlas, es que oímos o leemos de personas tristes, pesimistas, frustradas y contagiosas, la falsa conseja de que la felicidad pudiere ser inalcanzable. Esos criterios son producto del desconocimiento de sus propias capacidades y su potencialidad como hijos de Dios, lo cual pudo llevarlos a ejecutar acciones desacertadas y posiblemente inoportunas, que terminaron en fracasos.
Pero yo les digo con toda propiedad y cualidad, que lo verdadero es que TODOS NACIMOS PARA SER FELICES… ESE ES NUESTRO DESTINO. No exagero al expresarles que en nuestra vida lo normal debería ser la felicidad y la excepción la infelicidad. Se los aseguro yo que nací y crecí en condiciones precarias, cargado de temor y negatividad; pero no obstante logré superarlo y he mantenido mi felicidad, lo cual me constituye en un ejemplo viviente de nuestra capacidad natural para ser felices y la posibilidad real de conseguirlo.
Trataré de orientarlos a observar que las situaciones hasta ahora consideradas sin importancia, pueden convertirse en motivos de regocijo y seguridad personal generando nuevas e interesantes expectativas en el trato con las personas y el mejor aprovechamiento de las cosas, hasta que casi sin darse cuenta empiecen a cambiar su carácter; se hagan más optimistas y seguros en sí mismos, aumentando su autoestima y las personas empiecen a tratarles mejor. De alguna manera percibirán a Dios más cerca, y la vida se les hará mucho más fácil… y grata; hasta que mucho antes de lo esperado lograrán lo que por justicia divina les corresponde: SU FELICIDAD PERSONAL.
Así que aquí los espero todos los días para tratar sobre el apasionante tema de LA FELICIDAD POSIBLE, que es diferente a la utópica en la que creen los incautos quienes afirman que la produce la riqueza, la belleza, el poder o la fama; siendo lo cierto que ni individual ni de forma conjunta pueden hacerla por sí solas. A lo sumo podrían complementarla de manera subsidiaria, pero no fundamental. La idea del Blog es emitir criterios, estudiar y analizar opiniones que ustedes me hagan llegar, para de tal manera lograr una de las más loables aspiraciones de cualquier ser humano de buena voluntad: SER UTILES A SUS SEMEJANTES.
PROXIMA ENTREGA: QUE ES LA FELICIDAD
unavidafeliz.com 
Valientes no son los que no le temen a nada, sino, son aquellos a los que a pesar de tener miedo hacen frente al mismo!
Excelente tema para tratar, sobretodo cuando habemos personas que se nos hace tan dificil vivir en soledad y eso nos hace correr, a veces cometiendo errores, cuando vemos un rayo de luz que pareciera ser la felicidad. En realidad cuando simplemente fue algo equivocado lo que encontramos, la persona incorrecta.
Estoy muy contenta de poder estar en esta página que se puede apreciar desde cualquier parte del mundo y así hacer partícipe a quienes entren a ella de esas pequeñas grandes cosas que han puesto en ejercicio para hacer una vida feliz en familia.
A veces pensamos que escogimos a la persona equivocada y seguimos esperando que del cielo nos caiga aquella persona que nos «hará Felices». Lo que no nos damos cuenta es que de nuestro trato depende mucho el éxito de nuestras relaciones en general: la ternura, la amabilidad, el cariño. Eso lo he aprendido de ver a Nancy y Amaurí siendo amables, respetuosos, cariñosos el uno con el otro.
Les deseo el mayor de los éxitos y que desde donde estén puedan continuar guiando a todo aquel que se encuentre perdido para que pueda alcanzar… Una Vida Feliz.
Un abrazo, Mariú.
Lo felicito por ese interés en compartir en la Internet el resultado de sus observaciones y estudios. Sinceramente, no leí todo el blog, pero me llamó mucho la atención la sección llamada Presentación. El resto lo leí superficialmente, pero le prometo que trataré de leerlo más adelante.
Antes que nada, permítame decirle lo que la Biblia enseña que Jehová es «el Dios feliz» y que Jesús es el «feliz y único Potentado» (1 Timoteo 1:11; 6:15).
Nosotros los testigos de Jehová, aparte de ser asiduos lectores y estudiantes de la Biblia, dedicamos parte de nuestro tiempo a difundir las buenas nuevas, o buenas noticias, acerca del Reino de Dios. Hacer esa labor siguiendo el método de Jesucristo y que los apóstoles siguieron, es decir, predicando de casa es una fuente de gozo y felicidad. Pero la mayor satisfacción que tiene un testigo de Jehová estriba en ayudar a una persona a cultivar su espiritualidad mediante el estudio progresivo de la Palabra de Dios. Causa felicidad ver como ponen en práctica lo que aprenden, como mejoran sus relaciones familiares, y lo más importante: su relación con Dios. Por eso, en ese sentido, la Biblia dice «hay más felicidad en dar que en recibir» (Hechos 20:35).
La razón por la cual le escribo es para decirle que me gustó mucho como explica que la felicidad no radica en las cosas pasajeras y efímeras como la riqueza, la fama, el poder o la belleza; ni individualmente ni en conjunto.
Es interesante lo que la Biblia dice de estos cuatro aspectos:
Riqueza:
«Sin embargo, los que están resueltos a ser ricos caen en tentación y en un lazo y en muchos deseos insensatos y perjudiciales, que precipitan a los hombres en destrucción y ruina. Porque el amor al dinero es raíz de toda suerte de cosas perjudiciales, y, procurando realizar este amor, algunos han sido descarriados de la fe y se han acribillado con muchos dolores. A los que son ricos en el presente sistema de cosas da órdenes de que no sean altaneros, y de que cifren su esperanza, no en las riquezas inseguras, sino en Dios, que nos proporciona todas las cosas ricamente para que disfrutemos de ellas» (1 Timoteo 6:9, 10, 17).
Claro está, la Biblia no condena el ser rico porque como dice el texto anterior, el consejo es para los ricos. Sin embargo, la Biblia también dice esto: «Porque la sabiduría es para una protección [lo mismo que] el dinero es para una protección; pero la ventaja del conocimiento es que la sabiduría misma conserva vivos a sus dueños.» (Eclesiastés 7:12). Aquí se reconoce que el dinero es una protección, pero limitada. El consejo de la Biblia es que cultivemos la sabiduría, pero no la del hombre, sino la de Dios (Santiago 3:17) porque la sabiduría de Dios, como dice el texto, nos conservará vivos (después le explicaré como).
Fama y poder:
Generalmente la fama hace que las personas se vuelvan orgullosas y/o altivas. La Biblia dice al respecto en Salmos 138:6: «Porque Jehová es alto, y, no obstante, al humilde lo ve; pero al altanero lo conoce solo de distancia». También en Proverbios 16:18 dice: «El orgullo está antes de un ruidoso estrellarse; y un espíritu altivo, antes del tropiezo».
Belleza:
Nos dice Proverbios 11:22: «Como nariguera de oro en el hocico de un cerdo, así es la mujer que es bella, pero que está apartándose de la sensatez». Y 1 Pedro 3:3,4 aconseja: «Que su adorno no sea el de trenzados externos del cabello ni el de ponerse ornamentos de oro ni el uso de prendas de vestir exteriores, sino que sea la persona secreta del corazón en la [vestidura] incorruptible del espíritu quieto y apacible, que es de gran valor a los ojos de Dios». Sin embargo, aquí el apóstol Pedro no condena el que las mujeres se adornen. A lo que se refiere principalmente es que el adorno más notable que tengamos sea «la persona secreta del corazón», es decir, una personalidad piadosa, «que es de gran valor a los ojos de Dios».
Es verdad que Dios desea que seamos felices. La Biblia indica que el propósito de Dios para la tierra es que esté llena de personas felices, que cuiden la tierra y los animales. Aunque también explica porque actualmente estamos muy alejados de ello.
Lamentablemente, aunque una persona logre una vida de satisfacción y logro (que obviamente no es posible estando lejos de nuestro Dios feliz), la imperfección nos trunca la vida. Como dice Salmos 39:5: «¡Mira! Has hecho que mis días sean solo unos cuantos;
y la duración de mi vida es como nada enfrente de ti. De seguro todo hombre terrestre, aunque firmemente plantado, no es nada salvo una exhalación». O como lo menciona Salmos 90:10: «En sí mismos los días de nuestros años son setenta años; y si debido a poderío especial son ochenta años, sin embargo su insistencia está en penoso afán y cosas perjudiciales; porque tiene que pasar rápidamente, y volamos».
Sin embargo, Dios tiene una explicación del por qué y una solución para ello. Sin embargo, en vista de la hora que es, se la escribiré la semana que viene si Dios quiere y si usted me lo permite.
Espero que no le haya parecido inútil la información.
Roger Palacios.-