Posted in ABRAZO FRATERNO, ACERCAMIENTO, AFECTIVIDAD, AGRADECER A DIOS, ALEGRAR, ALEGRIA, ALMA ETERNA, AMABILIDAD, AMAR ES COMPARTIR, AMAR Y SER FELICES, AMISTAD, AMOR, APTITUD PARA SER FELIZ, ARBOLES DE NAVIDAD, ARTE DE VIVIR, BELLEZA DE LA MADUREZ, BELLEZA ESPIRITUAL, BONDAD, COLORES DE LA VIDA, COMPARTIR, CONTACTO CON DIOS, CRISTIANISMO, DERECHO A SER FELIZ, DIOS ES AMOR, DISFRUTAR INTENSAMENTE, DISFRUTAR LA GENTE, EL DAR ES ACTIVO, EL NIÑO INTERNO, ENTENDER A LOS NIÑOS, EPOCA DE SUEÑOS, ESPERANZA DE VIVIR, ESPIRITUALIDAD, FABRICAR SUEÑOS, FAMILIA FELIZ, FE, FELICIDAD, FELICIDAD VS. INFELICIDAD, FELIZ AÑO, FELIZ NAVIDAD, INOCENCIA, INTERACCIÒN HUMANA, JESUCRISTO, LA EDAD, LA MEJOR ORACION ES SER FELICES, MENSAJE DE CRISTO, MENTALIDAD POSITIVA, MI YO INTERNO, MUSICA Y VOZ, NACER, NACIMIENTOS, NAVIDAD, NIÑEZ FELIZ, NIÑO JESUS, NUEVO AÑO, NUEVOS PROYUECTOS, OBSEQUIO, PADRES E HIJOS, PAZ CONCORDIA Y ARMONÍA, PENSAMIENTO CRISTIANO, PROTEGER A LOS NIÑOS, RECREACION, REGALOS, RELIGION, SEMBRANDO SUEÑOS, SENTIR A DIOS, SENTIRSE FELIZ, SER NIÑOS, SOLIDARIDAD FAMILIA, SOLIDARIDAD Y AMOR, SONIDO DE CAMPANAS, TERNURA, VIDA BUENA, VIVIR FELICES, tagged EL NIÑO INTERNO, NAVIDAD TIEMPO DE AMOR on 28/12/2014|
Leave a Comment »
La navidad no es solamente la época más bella del año, sino que es también evocadora, porque siempre está llena de recuerdos gratos. No se trata de únicamente la celebración cristiana del nacimiento de Jesús, sino que nos contagia de alegría, de deseos de festejar, compartir, vivir momentos diferentes que tienen su naturaleza exclusiva… en este tiempo. Esta muy especial época del año, independiente de la edad, nos permite evocar nuestra niñez, juventud y madurez; pero de forma extraordinaria vuelve a despertar ese niño, que hiberna por once meses en el alma de todo cristiano y sólo permitimos revivir esos no más de treinta días, para luego esconderlo nuevamente; quizás para, inconscientemente, protegerlo de un mundo que, en mucho, a veces pareciera que olvidara su niñez. Es que cuando somos o actuamos como niños, todo en la vida nos sonríe.
La navidad tiene mucho de magia; no es el olor a pino verde, los animales y angelitos alrededor del niño recién nacido o, en nuestra Venezuela, el olor típico de nuestra hallaca, ni ese aroma especial del pan de jamón, dulce de lechosa o arroz con leche, que emergen de la cocina humosa de la casa de barrio, del horno decorado del apartamento de clase media o la lujosa “cuccina” de la residencia de la gente adinerada. No, no es nada de eso; se trata de esa magia que invade nuestras calles, centros comerciales y viviendas, que sólo en esta época del año nos hace iguales a todos en la alegría, sobre el trasfondo de las campanas y el ronco JA… JA… de San Nicolás, que con sus blancas barbas nos recuerda, que no hay limitante de edad para ser felices, porque la navidad es un sentimiento, que como el niño, hiberna en lo más profundo de nuestra alma, pero presto a despertar cuando suenan las campanas del amor, que nos inspira el niño Jesús que acompaña a ese otro niño propio que vive con nosotros… por siempre. Por eso, por todas esas razones, debemos celebrar la navidad, no obstante que la situación del País no fuere la mejor, la navidad hace el milagro de convertir la tristeza en alegría, para reunir al son de sus campanas nuestro más grande tesoro, ese que Jesús nos dejó cuando sentenció: si dos o más se reúnen en mi nombre, allí estaré yo presente: LA FAMILIA EN SANA PAZ, FELIZ Y UNIDA.
Read Full Post »